La forma de dar la bienvenida a un nuevo miembro de la familia es siempre una cuestión personal que debe reflejar tus valores y creencias. Tanto los bautizos civiles como las ceremonias de asignación de nombres son actos simbólicos sin valor jurídico y sirven para presentar al nuevo hijo a familiares y amigos.
Una ceremonia de bautizo es una celebración no religiosa para dar la bienvenida a un niño de una forma personal y significativa. La ceremonia se centra en su hijo y en los familiares y amigos que le rodean, y los padres darán el nombre a su hijo delante de los amigos y familiares que haya invitado a formar parte de este día tan especial.
El formato de esta ceremonia es flexible y el contenido y la celebración de cada ceremonia son individuales y únicos. Podemos ayudarle a crear una ceremonia en torno a lecturas poéticas y actos simbólicos que tengan importancia para su familia y ayuden a dar forma y ocasión al gran día.
La ceremonia no introduce al niño en un sistema de creencias, sino que reconoce la libertad del niño para formar su propia opinión y tomar sus propias decisiones a medida que crece. Los padres pueden hacer promesas a su hijo y también se puede invitar a los padrinos a que hagan sus propias promesas.
¿Cuánto dura un bautizo civil?
La duración de este tipo de ceremonias suele estar en torno a la media hora: puede haber variaciones del tiempo si hay varios invitados que quieren hablar, si los padrinos también quieren decir algo, si se hace algún acto simbólico como el de plantar un árbol, si se incluye música en vivo…
La ceremonia de bautizo civil puede celebrarse donde queráis: en casa, en el jardín, en la playa, en el parque, en un restaurante si hay un banquete después. Puede hacerla coincidir con el cumpleaños de su hijo o con una boda civil, la celebración será el doble.
¿Son bautizos como los cristianos?
Los bautizos cristianos son oficios religiosos celebrados en iglesias cristianas y dirigidos por sacerdotes o vicarios. Un bautizo es una ceremonia religiosa que da la bienvenida a alguien a la iglesia cristiana mediante el bautismo. El bautismo consiste en rociar o verter agua sobre la cabeza del bebé y el acto es la iniciación en la iglesia, por el que se elimina al bebé del «pecado original» (traído al mundo cuando Adán y Eva desobedecieron a Dios en el Jardín del Edén).
Origen de los bautizos civiles
El bautismo republicano data de 1792 en Francia, cuando los registros de nacimientos, matrimonios y defunciones pasaron de la Iglesia católica (juzgada demasiado monárquica) al estado francés.
Los bautizos civiles se introdujeron dos años más tarde, en 1794. Aunque cayeron en desuso, los alcaledes los recuperaron en la década de 1930, y su popularidad no ha dejado de aumentar desde el cambio de siglo.
Estas ceremonias no religiosas celebran la llegada de un nuevo bebé y le dan la bienvenida como miembro de la República Francesa.